Hola Albert, escribí recientemente a Euclides, pero el buen geómetra no me contestó, estaría con sus asuntos. Te escribo a ti debido a tu fabulosa carta y también para responderte algunas dudas que me preguntas en esta.
Yo soy un entrenador que hace cambia la estructura de juego durante el partido para poder desconcertar al rival, pero, aun así, sigo firmemente comprometido con los principios básicos de mi equipo y plantilla. Mi principal objetivo para ganar cada partido es que la jugada siempre inicie en el portero, después con los centrales o laterales, los cuales la pasarán a los extremos o mediocentros. Si el balón llega a un mediocentro, el siguiente pase deberá ir al extremo que esté situado más ofensivamente. Y en cambio, si el balón llega a un medio centro, este se la pasará al extremo para buscar un centro al área que mínimo dos jugadores estarán esperando.
En el fútbol hay dos tipos de equipos. Los ofensivos y los que mantienen la posición. Si el rival es ofensivo, aprovecharemos los huecos que se formen cuando estén descolocados. Pero si el equipo contrario mantiene las posiciones, aprovecharemos esto para jugar el balón por corto.
Con estas tácticas pretendo que en el terreno de juego participen los once jugadores para obtener una superioridad numérica y tener éxito en los partidos, y que, si no nos meten goles, ni el portero se aburra.
